Un equipo de investigación del MIT ha creado un nuevo diseño de red que podría hacer que Internet funcionase 100 o incluso 1.000 veces más rápido con un menor coste energético. La clave está en routers que sólo acepten señales ópticas provenientes de una única dirección y las envíen en un solo sentido, sin necesidad de convertirlas en señales eléctricas. La posibilidad de intercambiar grandes cantidades de datos a velocidades de vértigo tendría enormes consecuencias en fenómenos en auge como el vídeo en Internet o la televisión de alta definición, entre otros.
Fuente: 20 minutos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario